INTRO TO ARCHITECT I 3121-003

Pollock fue un influyente y gran artista estadounidense. Desde su infancia tuvo varios contratiempos, fue expulsado de varias instituciones educativas, demostrando desde muy joven ser una persona aislada y de personalidad volátil. Algunos historiadores indican que posiblemente padeciera de desorden bipolar. A esta condición se le añade su lucha contra el alcoholismo, adicción que le provocó que su condición empeorara, haciéndolo una persona muy inestable e irritable; incluso le provocó la muerte. Por tal razón, vemos cómo su salud mental ha quedado plasmada en sus obras.

El comienzo de su carrera fue con la realización de imágenes pictóricas para luego de varios años comenzar con la pintura abstracta. Él comenzó a utilizar el dripping, un método nuevo de expresión; como si fuera en forma de terapia. Dicho método consistía en verter, gotear y lanzar la pintura. Creando con estas técnicas sus obras de arte con contenido artístico entre los remolinos, puntos, pinceladas, gotas y chorros de pintura. En sus obras buscaba representar su subconsciente a través del automatismo. Llevando al espectador a reflexionar; al mismo tiempo que le servía a Pollock como terapia a través de sus obras, ya que él mantenía un problema de alcoholismo, lo cual en ocasiones le hacía mostrar un comportamiento violento y autodestructivo. Es por esta razón que, al realizar sus obras con ese método de energía tanto física como intuitiva en la pintura, quedó plasmado el movimiento del expresionismo abstracto.

Además, los problemas de salud mental no solo los vemos en este pintor, sino en varios grandes artistas mundiales que han sufrido algún tipo de problema, como Louis Wain, Ludwig Mies van der Rohe y, más conocido, Vincent Van Gogh. Tras algunos estudios realizados, se ha determinado que el arte es adecuado para comprender y expresar conceptos de comunicación y emociones. Además, la acción de crear y observar arte puede ayudar al bienestar psicológico de una persona, siendo un medio de comunicación.

Es importante tener en cuenta cómo las diversas formas del arte pueden ayudar a muchas personas a combatir sus problemas de salud mental. No solo les sirve como método de mejoramiento, sino que también pueden sentirse más relacionadas con ellos al ver que otras personas han pasado por problemas similares. También debemos normalizar la búsqueda de ayuda psicológica. A menudo, no tenemos conocimiento de cómo las personas a nuestro alrededor pueden estar afectadas por problemas mentales y cómo el arte puede ser un medio para lograr el bienestar.